Viene de VER PRIMERA PARTE
… brinden y que en definitiva unan y no divida a la familia de Caseros, por lo que en consecuencia aconsejamos: 1ro Fundar una nueva entidad bajo la denominación de Asociación Social y Deportiva “JUSTO JOSE de URQUIZA” cuyos propósitos son:
A) Agrupar en su seno a los siguientes clubs: Caseros, Nueve de Julio, Social y Unión, como así también las demás entidades similares de la localidad que lo soliciten previa conformidad con las presentes bases.
B) Propender por todos los medios a su alcance en fomento de la sociabilidad y deportes en general. Más adelante se deja claro que” La institución adoptara el color celeste en sus manifestaciones deportivas y sociales”.
Al pie de este documento, aparecen las firmas de los vecinos mencionados como representantes de cada club.
Se desconoce el motivo por el cual fue elegido el nombre de la flamante institución. Pero es probable que la elección haya sido influenciada por la gran impronta urquicista que se extiende en estos alrededores. Es probable, también, que la condición de unitario del entrerriano haya sido el criterio para optar por el color celeste como distintivo del club. También se desconoce porque por qué tanto el Nueve de Julio como el Social se alejaron del emprendimiento. Lo cierto es que el club Unión y el club Caseros le dieron luz al entrañable Jota Jota.
Pablo Debandi (84): socio vitalicio del club celeste dice: “Yo era del Unión que era el equipo del pueblo, el de lo grasas… El Caseros era el club de los pitucos”. La camiseta del Unión era verde con vivos amarillos. Cada vez que nos enfrentábamos con el Caseros – que tenían la camiseta a rayas blancas y negras – era un clásico… partidos que casi siempre terminaban a las piñas. Al principio, el Unión tenía la cancha entre las calles Sabattini, Rauch, De Tata y Avda. San Martin. Después la cancha se trasladó a Pringles y Moreno, en Villa Matheu… En 1926, el Unión tuvo un equipo histórico que gano la copa competencia de División intermedia: Montero, Farrell y Aramburo; Sosa, Arata y “Pepin” Ricciotti; Granara, Perrone, Ravignani, Risell y Nieves.
María Alejandra Iaraviglio: (79) es la esposa de Debandi y lleva al club Caseros en el corazón. Prácticamente desde que nació, vive en la calle Alberdi, entre Murias y Curapaligue. Enfrente estaba ubicado el club Caseros que, a partir del ’36, se convirtió en el Jota Jota. Recuerda: “el club estaba rodeado por una cina cina, tenía cancha de básquet, dos canchas de tenis de polvo de ladrillo… la cancha de futbol tenía alrededor una baranda hecha con caños. Lo que más me gustaba era “La Pérgola”… que era un galpón con piso de madera donde se hacían los bailes y también se pasaban películas… se entraba por una doble fila de pinos que tenían las copas unidas entre sí. Todo estaba impecable… el lugar lo cuidaba Pedro Bertolini” A María le gustaba recordarse jugando a los juegos infantiles instalados en la entidad o en las concurridísimas kermeses “…Mi papa me subía sobre sus hombros y había tanta gente que únicamente veía un mar de cabezas”.
El Chino Naranjo (85): quien vive en la calle Potosí, entre De Tata y Fischetti – fue, para muchos, uno de los mejores futbolistas de Caseros. El, nos señala, integro una de las primeras formaciones de Jota Jota “… junto con Santana, Carlitos Colosia, Borsani, los hermanos Rizzi, Juan Olliver, Yacomini, Zaffaroni y Arata…”
La revista “Caseros y su gente” señala que la nota continua en el próximo Nro., pero todavía no lo pudimos conseguir.
En el epígrafe de la foto dice: 1940. Comisión Directiva: Parados: C. Casas, P. Gutiérrez, A. Monteros, J. Chiavasco y R. Buceta. Sentados: J. Morris, L. De Diego, E. Buceta, José L Vásquez y F. Ricciotti.
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